13.9.08

Glengarry Glen Ross

Hay algo de suspense y misterio, pero nos la suda bastante. Lo que importa es ese retrato de los comerciales como monstruos sin piedad ni moralidad ni escrúpulos ni esperanzas ni nada bueno. llevan corbata y a simple vista parecen buena gente, pero son el Mal. Todos ellos, incluso el Jack Lemmon. Son depredadores. Malos bichos que mienten, estafan, traicionan y ninguno de estos atajos les ayudan a progresar. Porque no es que sean supervillanos, ni siquiera los que más triunfan en el arte del engaño, son sólo perdedores atrapados en un rol putrefacto. Igual que los depredadores del reino animal que no pueden dejar de zamparse gacelas porque es lo único que saben hacer para sobrevivir, los depredadores del reino comercial no saben hacer otra cosa que dar por culo a clientes y potenciales clientes. Son dignos de cierta compasión, pero también son dignos de justificable repulsa y miedo. Son cocodrilos atrapados en el barro.

Pero también es verdad que estos depredadores no son nada comparado con los comerciales de las compañías de telefonía de hoy en día. Despojos del sistema educativo al acecho de abuelitas distraídas a las que venderles un contrato ADSL que no saben usar, cazadores de ilusos a puerta fría, telemarketers cojoneros que no respetan ni la hora de la siesta... Ya quisieran ellos tener el carisma que David Mamet y James Foley regalan a sus decadentes depredadorcillos. Ya quisieran ellos tener la gracia de Jack Lemmon, Alec Baldwin, Ed Harris, Kevin Spacey, Alan Arkin y Al Pacino. Porque lo de las compañías de telefonía del siglo XXI ya no son cocodrilos decadentes, son alimañas o moscas verdes o algún otro bicho que hace tiempo que ya no sufre ninguna decadencia porque hace tiempo que tocó fondo. Cada uno de ellos mueve poco dinero, sus estafas son más pequeñas que las de los yuppies de los ochenta, pero son una plaga que ataca de forma repetitiva e indiscriminada y que, en suma, resulta mucho más molesta y afecta a mucha más gente. Al menos, los depredadores de la peli sólo atacaban a idiotas que tiempo ha habían llenado un formulario mostrando interés por el negocio. Con las alimañas de hoy en día nadie está a salvo. Tú puedes ser su próxima víctima. Quizá lo hayas sido ya. En mi casa concretamente nos han dado pro culo los de Telefónica, pero a mi hermana le dieron por culo los de Vodafone, y yo trabajé un tiempo para el servicoo técnico de Auna y puedo confirmar que eso también era una casa de putas.

Nota: notable.
(Y ya que estamos con el tema, les dejamos con algunas ideas para el trato con telemarketers)

15 comentarios:

Anónimo dijo...

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Leo que Caótica Ana fue derrotada. Veo que su creador se resiente. Sigo viendo y leyendo cómo gente a la que una vez aplaudí abuchean esta peli con decrépita sorna y vitriólica baba. Siento la decepción. Percibo la suspicacia. Sé de sus almas, y ahora matizo: Cuán grande es la decepción hacia los imbéciles que pululan a mi alrededor. Con cuánta mierda ha uno de toparse para encontrar a un ser noble? Con cuántos subidos al furgón de los subnormales a los que sus cuidadores llevan al cine desde el siquiátrico de las calles, o las mansiones, a la inmensidad de una verdad enorme que se les planta demasiado cerca y por ello ni tan siquiera distinguen?

No es la derrota de Ana la victoria de un ser? No es la muerte del capaz y posible la confirmación del sentimiento que guarecerá por siempre? No es ella nuestra voluntad aunque tal vez inconsciente? Y es que ana no 'triunfó' porque sencillamente ella no quiso 'triunfar'. No en el Wall Street de los decadentes. De los hastiados críticos de cine. No embutida en corsetes. No quiso ser prostituida por una causa tan escasa. Porque su kaos nos sobrevuela, y haberlo engrandecido con premios o elogios distraídos, habría sido corromper su inmutabilidad en nuestro cada vez más estrecho vacío. Porque es una película para dioses nacidos del arte, y no para personas criadas en los parques de las ciudades. Sin heno, ni arrozales, ni cueva, ni montes, ni río de la vida, ni cordilleras pestilentes. No, si acaso, protuberantes y firmes. Y a los que creen que su peli fue un fiasco inexplicable, entiendo lo de inexplicable pero más que entenderlo, compadezco esa frase. No es inexplicable que una película como esa no triunfe. Es inexplicable que todos los que la anulan consigan llegar al último paso antes de alcanzar su muerte sin sucumbir en el más infinito infierno de sus eternamente reprimidas pasiones.

Anónimo dijo...

Por cierto, la elección de Antonio Vega para interpretar el tema de María en ésa, una de las mejores secuencias, no creo que fuese casual, porque haber injertado ahí al pavo de los Secretos de quienes creo es la versión original, hubiese supuesto no ya adelantar esa fenomenal cagada final, sino sencillamente, derrumbar una obra de arte colosal.

Anónimo dijo...

PEQUEÑA MISS PUTA!!!!!!


VIVA LA CINEFILIA!!!!


¡¡¡¡¡JA JA JA JA JA!!!!!

Hitlercito dijo...

el anuncio de Epuron en youtube está simpático...

pero aún así, la publicidad debería estar al servicio del Estado!!

Nelo dijo...

Cierra el pico mequetrefe. A mí lo que más atención me llama es que personajes como El Listo este hablen maravillas de bodriazos hiper-desfasados y mega-chungósmicos como El cabrón de orquideas o Eternal Shunshine y luego, ante una jodida maravilla como lo es Caótica Ana, no sólo se les vaya la pinza con infumables argumentaciones sino que, además, resulten detestables. En fine... Alguien me resume el post, no creo que lo logre leer ni un poquete...

Nelo dijo...

(pregunta) eh?

Nelo dijo...

Y seguro que Viridiana también apesta, eh? NI PUTA IDEA, ni de cine ni de letras...

Nelo dijo...

Claro, si aquí es donde se entiende la poesía como un instrumento de ligue... Estela Woody Allen, señores... Qué hacen?

Anónimo dijo...

Capciosamente tiendo a la liberación vespertina de mis impulsos más sólidos. Esto no quiere decir que la causalidad refleje ésto, sino todo lo contrario. Es más bien un proceso de lógica aplica que imbuída, por no carecer del sistema sináptico apropiado, seres gilipollas que requieren una atención definitoria, no se convierten más que en mezquindad sencilla, MÁMÁ! LIMIPIAME LA PAPILLAAAAAAAA

Nelo dijo...

A quién se le ocurrió la idea de colocar una encuesta tan tonta??? Hasta ese punto llegan vuestras banales aspiraciones de hasta llegar a, en un resquicio de vuestra esperanza albergada, poder pensar que no iba a ganar por absoluta mayoría la opción propia? En fine...

Anónimo dijo...

Bueno, bueno, parece que La cinefilia está reviviendo con el anuncio del libro. Habéis pasado de tener 5 o 6 comentarios a 30, felicidades.

Kwisatz, a través del Filmaffinity dijo...

Es la primera vez que me digno a mandar un mensaje a otro usuario de Filmaffinity, y más tratándose de una crítica, porque creo en la libertad de expresión y procuro mantenerme al margen de lo que cada cual opina de las películas.
Ahora bien, al leer la crítica de la pelicula que menciono en el asunto me he sentido impelido a escribirte por lo que considero un insulto a una profesión más que la crítica a una película.
No tengo ni idea de cómo te ganas la vida, pero creo que vas sobrado de soberbia.
Y es que tu despiadado análisis de la figura del comercial denota tu falta de conocimiento sobre cómo funciona el mundo de la empresa privada, porque de lo contrario sabrías que una empresa que no disponga de un equipo comercial que dé a conocer sus servicios/productos no tiene nada que hacer en un mercado sobresaturado por la oferta.
Y perdona que te diga, pero con más o menos estudios, los hay que tener muy bien puestos para salir a la calle todos los días (o bien pasarse 8 horas al día llamando a extraños) y aguantar a necios prepotentes como tú.
Y que sepas además que hay trabajos de comercial más cualificados que los que tú describes, porque no todo consiste en vender seguros o telefonía móvil a particulares.
Muchas veces se necesitan tener conocimientos técnicos y científicos para saber lo que estás vendiendo y cómo asesorar al cliente, que puede ser un médico, un científico o un técnico de empresa.
Asi que lo de desecho educativo mejor te lo aplicas a ti mismo y de paso aprendes a respetar el trabajo de los demás. Y te lo dice alguien con una licenciatura superior científica y un MBA en dirección y administración de empresas.
Naturalmente ya te habrás figurado cuál es mi trabajo, pero aunque no lo fuera seguiría diciéndote lo mismo, porque aquí cada cual se gana el pan como puede y merece el máximo respeto, porque además muchas veces uno trabaja donde puede.
Por ello, suponiendo que tu soberbia te permita admitir el erroneo planteamiento de tu crítica, te invito a que la retires y la próxima vez que opines sobre el trabajo de otros te documentes mejor y seas más respetuoso.

Listo Entertainment dijo...

"Naturalmente ya te habrás figurado cuál es mi trabajo."
¿Telemarketer?

Es coña, no pasa nada, mil disculpas por la reseña. Tampoco quería ofender a nadie, soy consciente de que existen comerciales honrados igual que existen funcionarios trabajadores y curas no pederastas, pero seguro que a ti tb te han intentado estafar mil veces los comerciales de otras empresas y sabes a qué me refería.

Anónimo dijo...

Qué gil. Y seguramente habrán soldados honrados, pero no justifica la acción, ni siquiera en tiempos de guerra, porque todos sabemos, a estas alturas ya, dónde están los verdugos, dónde están las víctimas, y quienes son los gilipollas que creyendose sin otra opción continúan alimentando las mierdas de nuestra patético mundo capitalista (lease "nosotros mismos"). Marketing es sinónimo de engaño, desde el ángulo que sea.

Anónimo dijo...

PD: Mike Nichols es un cracky ;)